Había que abrir una puerta blanca, subir unas escaleras de metal soportando un olor a fritanga y a encierro fermentado, golpear otra puerta blanca para entrar a una habitación de paredes manchadas de humedad, tenía una ventana amplia donde se avistaba un cerro, pensé que en verano debía ser agradable ver todo eso reverdecido, conocía todo dentro de esa habitación pero preferí quedarme quieta ahí, esperando a que alguien llegue y me diga eso tan importante que querían que haga, el calor me golpeaba y por lo que ahí sentí, me pareció que el viento no existía.
Sentí las voces y me inquieté, comenzaba a sentirme ansiosa, pensé en pedirle un cigarrillo a un flaco alto, con cara pálida, ubicado justo al lado de una puerta, como si cuidarla fuese su único deber en la vida. Algo me contuvo, quizás el hecho de no querer retomar ese vicio asqueroso. Por fin los pasos se asomaron por la muy bien cuidada puerta y me entrevisté con el individuo mas desagradable que había visto en años.
Tenía una joroba en su espalda, poco pelo y las cejas gruesas. Un acullico de coca que, supongo yo, repelen a cualquier mujer con buen gusto y la piel grasa. Una gota de sudor le calló por la frente y su voz partió el clima en dos.
-Acá es donde se encuentra lo tuyo, tenés cuatro días para sacarlo de circulación, no sé que harás, pero eso es todo lo que, por ahora te puedo decir, mas adelante te voy a ir diciendo mas. Anotó unas cosas en un papel amarillento y me lo dió. En ese momento el custodio inamovible de la puerta se ubicó justo detrás del escritorio y miró por la ventana, me pareció un muertovivo.
- Cuatro días, dije.
-Si nena, cuatro, para el viernes quieren que termines lo tuyo, cualquier cosita llamá, pero no vuelvas hasta que nosotros te llamemos. -Se levantó. El muerto volvió a su ubicación.
Salí de el edificio y paré un taxi, estaba paralizada, sentía miedo y adrenalina lo que me sorprendió, yo había decidido meterme en este lío sola, dije la dirección de mi casa y abrí el papel, vi que ese lugar no era lejos, pedí que mejor me lleve hasta ahí. Pasamos las vías y entramos unas cuatro cuadras, cada una mas tranquila que la otra.
-Pare aquí, dije. Pagué y bajé.
(quieren mas?!?!??!?!?!?!?)
11 comentarios:
claro que queremos más.....
uhhy quiero saber en que termina esa novela....(no me la pierdo)
Oye.. y con respecto a lo que escribiste en mi blog, pues te cuento que aca en Colombia, el lunes pasado se hizo una marcha impresionante en todas las ciudades para rechazar el secuenstro y a las FARC.. marcharon hasta en otros paises donde hay colombianos... raro que no lo hayas visto en las noticias.. fue algo casi mundial.
y ps..nada.. casi todos los blogs de colombia estan hablando sobre eso.
Un saludo del Dr Cossete.
Si si si, yo tambien espero la segunda parte.
Entendi la historia pero me faltan cosas para entender my bien esto. Aun asi es como si estuviese leyendo un cuento para la escuela.
Ando un poco desaparecido de esto. A decir verdad, de todo. No se donde estuve todo este tiempo pero en poco me vas a tener que poner al tanto de todo.
Otra cosa. que lindo ese cerro de fondo. Lo que daria por estar ahi ahora mismo y no hacer nada mas que respirar un poco de aire.
Abrazo fuerte nena
hola distraida... oye, me gustaria que vieras unas fotos que tengo en el blog y comentes.
un abrazo del Dr Cossete
Me suenan a personajes de SinCity, habrá que ver como sigue :)
AH, Y QUÉ PASO?..
lindisima foto
no hay manera de que no sea de verdad
gracias, me emociona groso
y me quedé esperando el final de la historia..... dale, escribi otra vez.
un saludo de Cossete.
Ya voy a volver, esperen que me agarre la catatonia S:
si yo volví, por qé no volverías vos? =)
beso amiga.
ya voi a tener tiempo para tener una vida, lo prometo.
Uf, qué engorro ser un personaje de feinmann...
dale gas !
y entonces...que es lo que sigue?
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