viernes, diciembre 29, 2006


Te desarmabas en formato agua y yo te tenía que contener por mí, por vos y por todas esas cosas que no se hacen, te desvestías por dentro, cosa que siempre quise que pase, y ya era tan tarde que no puede evitar el hecho de no hacer nada, terminamos tan desiguales, pensar que me creí el cuento de que cuando una se enamora se enamora y punto. Y ahora mirame, en la lucha interna de sacar de mi cabeza esos meses y el día de ayer en el que supongo nunca te hubiese querido ver.
Ahora resulta que la mas inhumana soy yo, y vos sos el hombre hecho y derecho que floreció en lágrimas y me dejó paralizada en abrazos duros y pesados, que quedan ahí, durante un par de estaciones hasta que se terminen los miedos y esa pesadez que ahora me estanca dándo vueltas a la manzana para saber si te quedaste cerca mío o no.